Pocas cosas pueden salvarte cuando ya perdés tu propia estima. Y pensas que nunca importó el querer, que nunca importó importar.
Pocas cosas me ayudaron a dormir sin soñar, porque me basta con vivir lo cotidiano. La brisa que se escurre por los dedos.. y tu sonrisa que la acompaña presurosa. Va más allá del simple amar, es amar ser feliz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario